Desde el año 2013 que un inmueble en alquiler o venta cuente con el Certificado de eficiencia energética. Se trata de un informe que resume el comportamiento energético de un inmueble. Su validez queda vigente durante 10 años.
Todos los consumidores tienen derecho a esta información. Cuando alguien alquila una vivienda sin este certificado, se expone a una sanción administrativa por infringir las leyes de protección al consumidor. Si se trata de una venta, es siempre obligatorio, ya que sin este certificado no se puede registrar la vivienda al nombre del nuevo comprador.
Su inmueble recibirá una calificación que va desde la letra A (excelente) a la G (deficiente). Esto no significa que si puntua G tenga que repetir el proceso. Su inmueble siempre pasa favorablemente esta inspección. La unica diferencia es que la nota que saque puede suponer hasta un 70% de ahorro para el cliente.